La dosis de teofilina debe ser individualizada para cada paciente con el fin de proveer los máximos beneficios con un riesgo mínimo de efectos adversos. Como dosis inicial se pueden suministrar 300 mg por día, fraccionados en una o dos tomas. Después de 3 días, si es necesario y si el medicamento es tolerado, la dosis se puede incrementar hasta 600 mg por día, divididos en dos tomas de 300 mg.